sábado, 31 de enero de 2009

Airi Saeki:

El capitán de la decimotercera sonrió amablemente ante la pregunta de Hayato. Era del tipo de sonrisas que se echan cuando no se quiere responder directamente a una pregunta.

-No, eso se sabrá el día que os graduéis. Pero seguro que donde vayáis estaréis encantados. Ahora, si me disculpáis debo irme.

Nos saludó a todos y nosotros le hicimos una reverencia como debía ser. No eramos ni siquiera shinigami, eramos simples estudiantes y como tales, debíamos guardar las formas.

-¿No es el hombre más maravilloso que habéis visto en la vida?-dije maravillada cuando estuvo lo suficientemente lejos.- Ojalá nos graduemos pronto, quiero entrar en las divisiones cuanto antes mejor.

Mis compañeros me miraron como si estuviera medio loca o algo así, pero no podía evitarlo, llegar a su división era mi sueño. Hayato tenía sus dudas pero yo siempre lo tuve muy claro, si entré en la Academia era para poder llegar, algún día, a estar bajo sus órdenes.

El día se acababa, otro día en la cuenta atrás del destino. Los cuatro nos recogimos en uno de los cuartos que teníamos a charlar, como siempre, a reír como siempre y a darnos cuenta del poco tiempo que nos quedaba de estar juntos.

-Entonces... queda muy poco para la graduación. -se aventuró a decir Rikichi- Os echare de menos a todos.
-Tampoco es que nos vayamos a morir, Rikichi -rió nervioso Hayato- Nos veremos muchas veces, estamos seguros de eso ¿verdad?
-Cierto. Y seguiremos tan juntos como siempre.

Yo deseaba que eso fuera cierto, que estuviéramos juntos como siempre, para siempre.

Pero la realidad era que la semana próxima, era nuestra graduación.

Y todo iba a cambiar radicalmente para nosotros.

viernes, 2 de enero de 2009

Hayato Araki:

Tras la interesante clase de Yamazaki sobre los khidô, pedimos permiso para salir al aire libre, ya que mientras no fuésemos shinigamis estábamos bastante limitados a las órdenes del maestro. Teníamos suerte con tener a Yamazaki como maestro. Era estricto y se encargaba de hacernos saber las normas, aunque era de la clase de maestro que siente debilidad por los alumnos sobresalientes.

De nuestra promoción, los sobresalientes éramos Airi y yo, por lo que Yamazaki a veces nos levantaba la mano en cuanto a las normas y nos dejaba salir de la Academia para Shinigamis siempre que no nos metiésemos en problemas ni hablásemos con los Capitanes y Tenientes de las Divisiones si no se dirigían a nosotros.

-¿Y finalmente en qué división querrás estar?.- preguntó Rikichi de pronto.- Sabemos que dudas entre la 3ª y la 8ª, pero debes elegir ya.

-Es esto un ultimátum?.- pregunté irónicamente.- Nunca pensé que fueses tú, Rikichi quien me daría uno…- de pronto Hanatarou se rió.- Esto es más cosa de Ai..

-Da igual Hayato, pero vamos, suéltalo ya, deberás decidir ahora.- dijo Airi interviniendo e interrumpiéndole, Hayato la tenía mucho respeto como compañera y la tenía mucho cariño y aprecio, aunque sabía que se separarían, no estarían en la misma División.

-Está bien.- suspiré y comencé a pensar. La primera división que apareciese en mi mente al pensar en ellas sería mi elegida, al hacerlo dije.- Si pudiese elegir… querría estar bajo las órdenes del General Kyoraku!.

-Seguro que si te gusta el sake no tendrás problemas en estar en la 8ª.- comentó Hanatarou sonriendo.- Yo tengo claro que estaré en la 4ª bajo las ordenes de Unohana.

-Aun así pueden trasladarte si lo creen conveniente.- intervino Rikichi.
-Pero no seas negativo!.- grité de pronto y le di una leve colleja.- Deberías saber que el Capitán Kyoraku estaría orgulloso de tenerme en su División.
-Si, y la teniente Nanao te pondrá a raya para que no sigas los pasos del Capitán sake.

Tras una mirada de indiferencia por mi parte continuamos mientras veíamos cómo una pareja de Shinigamis entrenaban el uno con el otro mientras que otros cuantos se dedicaban a tareas cotidianas y a contemplar los entrenamientos.

De pronto alguien con una increíble cantidad de reiatsu se presentó ante nosotros, Hanatarou y yo nos inclinamos en señal de saludo, al levantarnos vimos que era un Capitán.

-Capitán Jūshirō!.- Airi se sonrojó al ver que era el Capitán al que más admiraba, el de la 13ª División, donde ella deseaba estar.
-Buenos días Airi, Hayato, Rikichi y Hanatarou.- nos saludó con una sonrisa amable, habíamos oído que era el Capitán más amable y se contaba entre los más poderosos shinigamis de Soul Society.


-¿Qué tal lleváis la Academia de Shinigamis?.- nos preguntó interesado.
-P..pues.- comenzó Hanatarou tartamudeando.
-Muy bien!.- gritó Airi, a la que se le pasaba su evidente enrojecimiento, Ukitake la sonrió.- Me alegra saber de mano de Yamazaki que sois los mejores de vuestra promoción.

-Si Capitán Jūshirō, nos enorgullecemos de ello… además deseamos formar parte de una de las Divisiones.- dijo Rikichi, Ukitake se quedó callado.- ¿Sabe usted en cuál estaremos?.- preguntó de repente. Hayato ágil le dio un codazo a Rikichi por su pregunta y éste se calló al momento.